al-Andalus

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miércoles, 8 de abril de 2015

Comentario personal del libro de Alejandro García Sanjuán

Pensaba escribir a finales del mes pasado, pero la verdad es que he dedicado gran parte de mi Semana Santa a terminar de leer La conquista islámica de la península Ibérica y la tergiversación del pasado. Del catastrofismo al negacionismo de Alejandro García Sanjuán. Aquí no pretendo hacer un resumen ni una reseña (pero por si acaso la escribo hoy y no antes), si no una breve introducción y un comentario personal centrándome en el estilo del autor.


En este libro, sobre todo en la introducción y el primer capítulo, se nos explican tres perspectivas respecto a la conquista islámica. El catastrofismo, defendido por los conquistados como López Pereira, Lafuente y Simonet, expone que la conquista islámica fue una invasión que llevó a la nación a la catástrofe. El triunfalismo, discurso de los vencedores entre los cuales encontramos a Sayf ibn ‘Umar, al-Tabari, Ibn ‘Abd al-Hakam, Mustafa Kamil, Ibn Hazmy Rachid Boudjedra, que al contrario que los hispanos, defienden el explendor de la cultura árabe y el  fath (la “apertura”islámica). Por último, el negacionismo, perspectiva iniciada por Ignacio Olagüe que describe el hecho de la conquista islámica en la península como fraude histórico, seguido por González Ferrín y otros.

Estas teorías continúan hoy en día y todas, cada una a su manera, son tergiversaciones del pasado. García Sanjuán lo que quiere hacer con su libro es demostrar la poca coherencia de algunas teorías si nos remitimos a las fuentes y a las pruebas de dírhams y escritos que tenemos hoy en día. Dada la amplia bibliografía, las fuentes arqueológicas e históricas, sabemos que García Sanjuán no habla por hablar. Está muy bien documentado este libro. Tanto es así que a veces se hace difícil entender qué es lo que dice García Sanjuán entre tanta cita.

A pesar de su intento por contrarrestar las fuentes para ofrecer un punto de vista objetivo, lo que hace es hacernos pensar que nos está exponiendo las diferentes teorías de forma objetivas y que la teoría del negacionismo es tan irracional que estamos de acuerdo con él. Pero él, no es para nada objetivo. García Sanjuán nos expone y remite a las fuentes y nos explica las diferencias, pero utiliza unos adjetivos y un tono muy irrespetuoso, sobre todo hacia los seguidores de la corriete negacionista y en especial a los dos mencionados anteriormente. Con una crítica tan feroz e insultante, no me extraña que en Inglaterra hayan vetado el libro. Aunque para gustos los colores, por que en Francia le han dado un premio al mejor ensayo histórico.

En mi opinión, la perspectiva negacionista es tan incoherente que con sólo citar algunas partes de Les árabes n’ont jamais envahi l’Espagne (por si el título no lo dijera todo ya) o mostrar los hallazgos históricos que demuestran que los árabes conquistaron la península y pasaron más de ocho siglos en ella, sería suficiente. Por su puesto, en toda crónica histórica hay subjetivismo y siempre está el discurso de los vencidos y el de los vencedores, exaltando las partes que más les convienen y omitiendo otras, pero para mi las mejores crónicas o relatos históricos son los que se cuentan contrastando fuentes de un bando y de otro e intentando ser lo más objetivos posible.
En definitiva, el libro podría haber sido mucho mejor y más ameno y didáctico sin faltar a terceros y así, cada uno, nos haríamos la idea que quisiésemos viendo todas las fuentes contrastadas.

Si os interesa el punto de vista de Ferrín, he encontrado una entrevista que ha sido publicada hoy: entrevista. Y si os interesa el punto de vista de Maribel Fierro (de la que ya hemos leído en clase una reseña y el prólogo del libro de Sanjuán) y estáis pensando en ampliar estos conocimientos después de terminar la carrera, aquí os dejo información sobre un curso de posgrado dirigido por ella: curso.


Bibliografía:
GARCÍA SANJUÁN, A., La conquista islámica de la península Ibérica y la tergiversación del pasado: Del catastrofismo al negacionismo, Madrid, Marcial Pons, 2013.

3 comentarios:

  1. Gracias, Irene. La información que mencionas me parece muy interesante. Me hubiera encantado que la hubieras relacionado, comparado, dado una opinión a la luz de estos tres productos culturales. Quizá la próxima

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  2. Mi opinión es que la realidad no es ni lo que nos cuentan los vencidos ni los vencedores, ni mucho menos los negacionistas (ya que tenemos documentos y objetos que demuestran que esta teoría no se sostiene. Lo que pasó no lo podemos saber a ciencia cierta, pero probablemente sea una síntesis del triunfalismo y el catastrofismo. Ni al-Andalus fue un paraíso donde todos cohabitaron en armonía, ni fue una invasión que llevó a Hispania a la catástrofe. Hubo conquistas por pactos y otras por la fuerza. Los habitantes de tres culturas y religiones diferentes coexistieron, a pesar de algún problema que otro. Supongo que hubo gente que se adaptó más fácilmente que otros. Y siglos después llegaron la arabización, los matrimonios mixtos, etc. Hoy en día, no podemos hablar de razas porque nuestra sangre está tan mezclada que nadie sabe nuestros orígenes de manera cierta.

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  3. Estoy de acuerdo con tu argumento sobre el libro; en cuanto a la opinión, García Sanjuán es un antinegacionista total, cuyo punto de vista es el opuesto al de Olagüe y sus seguidores, por ello lo critica tanto y hace tantos comentarios contra esa teoría. A mí me pareció un poco insistente en el tema del negacionismo lo que convirtió el libro en algo pesado, y es verdad que se podría haber centrado más en dar los datos y explicar los hechos que criticar tanto al negacionismo, pero es lo que tienen los estudiosos en sus obras contra las teorías de los demás. Me acuerdo que en clase de literatura hebrea había dos autores de gramática con posturas totalmente contrarias y que sus escritos era como si fuesen cartas entre ambos y no manuales a seguir. Pero por una parte veo bien esa crítica hacia las teorías de los demás siempre y cuando tengas una buena argumentación con la que sostener la tuya.

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